Los imprevisibles Carlsen, Ivanchuk y Morozévich, junto a la solidez del chino Wang Yué, participan en otra edición de lujo del Magistral de León
02.03.09 -
02.03.09 -
Los analistas opinan que Carlsen no tardará en ser el nuevo campeón del mundo.
La afición leonesa admira a Ivanchuk por su genialidad y sus despistes.
La afición leonesa admira a Ivanchuk por su genialidad y sus despistes.
La orquesta está afinada. Los sones sobre el tablero convertirán a León otro año más en la capital mundial del jaque mate. Y no es para menos, porque el torneo Magistral ha reunido a cuatro grandes figuras en otra edición de lujo. El Mozart del ajedrez, un genio despistado, otro rebelde y un durísimo gran maestro chino disputarán la edición XXII de uno de los mejores torneos rápidos del mundo, el Magistral Ciudad de León, del 4 al 7 de junio.
Esas definiciones corresponden a Magnus Carlsen, 4º jugador del ranking mundial (Noruega), Vasili Ivanchuk, 3º del mundo (Ucrania), Alexánder Morozévich, 5º del mundo (Rusia) y Wang Yué, 11º del mundo (China), respectivamente. Tanto las semifinales como la final se jugarán en una nueva y distinguida sede: el Auditorio de la capital leonesa.
Marcelino Sión es el artífice de que el Magistral de León vaya creciendo año tras año y consiga algo que parece imposible, que cada edición tenga más atractivos que la anterior. Por León han pasado todos los campeones del mundo de la última década, los mejores jugadores jóvenes de todos los continentes, las figuras más destacadas de ese deporte y conferenciantes de lujo, como Spassky hace dos años, que ayudan a la difusión del torneo a nivel internacional, a la comprensión de un deporte como el ajedrez y al entusiasmo creciente de los cada vez más niños que lo practican.
Fácil lo difícil
«Lo que más admiro en Bobby Fischer es su capacidad para que parezca fácil lo que en realidad es muy difícil. Yo, modestamente, intento imitarle en eso». Magnus Carlsen pronunció esas palabras el 17 de enero de 2008, unas horas después del fallecimiento del estadounidense, como homenaje al ajedrecista más carismático de todos los tiempos.
Hacer fácil lo difícil es precisamente la característica más distintiva de los genios, y nadie duda de que el precoz jugador noruego merece ese apelativo. Por ejemplo, a los cinco años sabía de memoria la superficie, el número de habitantes, la capital y la bandera de todos los países de los cinco continentes; y a los 13 años y 3 meses se convirtió en el gran maestro más joven de la historia en ese momento.
Ahora, a los 18, ha madurado mucho más que en la edición de 2005, cuando fue eliminado en semifinales por el actual campeón del mundo, el indio Viswanathan Anand. Nadie duda de que el Mozart del ajedrez ocupara ese trono; sólo falta saber cuándo.
«Pero eso no garantiza, en absoluto, su triunfo en el Magistral Ciudad de León, donde se enfrentará en semifinales a Morozévich o a Wang Yué (las normas del torneo indican que los dos primeros cabezas de serie no pueden encontrarse hasta la final). El ruso es tan genial como irregular, y por tanto puede tumbar a cualquiera; de hecho, su fama de rebelde no sólo se refiere a lo que ocurre fuera del escenario sino a que no acepta la superioridad de nadie en el tablero. Y para entender la enorme dureza del chino basta un detalle: en 2007 sólo perdió el 2% de sus partidas», manifiesta Marcelino Sión.
El genio despistado
En la otra semifinal estará el ucraniano Vasili Ivanchuk, de quien muchos expertos aseguran que ya habría sido campeón del mundo si su sistema nervioso fuera más estable. «Pero es precisamente ahora, en la frontera de los 40 años, cuando Ivanchuk muestra ese equilibrio que se ha traducido en una serie de resultados brillantes y en el tercer puesto de la lista mundial», asegura el director del torneo leonés.
Admirado por su genial creatividad, muy querido por su carácter cariñoso y tendencia al despiste, Ivanchuk es el campeón vigente del Magistral Ciudad de León, ya que en 2008 logró destronar a Anand (vencedor en siete ocasiones) en un duelo apasionante.
«Hay que recordar que después de una emocionante recta final, Vassily Ivanchuk ganó la competición y se alzó con el título del campeón del mundo de Ajedrez Relámpago 2007. Alcanzó 25,5 puntos en 38 rondas. El vigente campeón del mundo Vishy Anand, el segundo día de la final mostró mejor forma y parecía que se iba a coronar campeón de nuevo, adelantando al genial Vasili Ivanchuk. No obstante, en la última y decisiva ronda, justamente entre Anand e Ivanchuk, el indio sufrió una derrota y tuvo que contentarse con el segundo lugar (24,5 puntos). Tercero quedó el defensor del título, Grischuk gracias al mejor coeficiente de desempate que Kamsky».
La rebeldía corre a cargo del ruso Morozévich que llegó a manifestar «todo el sistema para jugar el campeonato del mundo falla por la base». En una entrevista en Sport Express, el cuarto clasificado en la lista mundial anuncia que no participará en el ciclo del Grand Prix de la FIDE, uniéndose a los tres primeros Anand, Kramnik y Topalov (según dice él) en este boicot. «Al rechazar jugar en el Grand Prix de la FIDE, no estoy abandonando la lucha», y explicó también que «no considera que haya una discriminación hacia los ajedrecistas rusos en los torneos de más alto nivel».
Cambio de sede
Tras ganar un gran prestigio internacional a lo largo de 21 ediciones (prácticamente todos las estrellas del ajedrez de los últimos dos decenios han jugado en el escenario del edificio de la Junta de Castilla y León), es un buen momento para cambiar de sede. La nueva es el majestuoso Auditorio de León, dotado con la más moderna tecnología, que también se aplicará a los comentarios de las partidas, en directo para el público e Internet, que realizarán el gran maestro Miguel Illescas y el maestro internacional Michael Rahal.
El torneo mantiene la simbiosis entre los organismos públicos (Ayuntamiento, Junta, Diputación y Universidad) y las empresas privadas (Alsa, Editorial MIC y Diario de Empresas), además de otros colaboradores. Una de las mejores pruebas de que el Magistral de León ha echado raíces profundas y es una de las citas más importantes del calendario mundial.
Esas definiciones corresponden a Magnus Carlsen, 4º jugador del ranking mundial (Noruega), Vasili Ivanchuk, 3º del mundo (Ucrania), Alexánder Morozévich, 5º del mundo (Rusia) y Wang Yué, 11º del mundo (China), respectivamente. Tanto las semifinales como la final se jugarán en una nueva y distinguida sede: el Auditorio de la capital leonesa.
Marcelino Sión es el artífice de que el Magistral de León vaya creciendo año tras año y consiga algo que parece imposible, que cada edición tenga más atractivos que la anterior. Por León han pasado todos los campeones del mundo de la última década, los mejores jugadores jóvenes de todos los continentes, las figuras más destacadas de ese deporte y conferenciantes de lujo, como Spassky hace dos años, que ayudan a la difusión del torneo a nivel internacional, a la comprensión de un deporte como el ajedrez y al entusiasmo creciente de los cada vez más niños que lo practican.
Fácil lo difícil
«Lo que más admiro en Bobby Fischer es su capacidad para que parezca fácil lo que en realidad es muy difícil. Yo, modestamente, intento imitarle en eso». Magnus Carlsen pronunció esas palabras el 17 de enero de 2008, unas horas después del fallecimiento del estadounidense, como homenaje al ajedrecista más carismático de todos los tiempos.
Hacer fácil lo difícil es precisamente la característica más distintiva de los genios, y nadie duda de que el precoz jugador noruego merece ese apelativo. Por ejemplo, a los cinco años sabía de memoria la superficie, el número de habitantes, la capital y la bandera de todos los países de los cinco continentes; y a los 13 años y 3 meses se convirtió en el gran maestro más joven de la historia en ese momento.
Ahora, a los 18, ha madurado mucho más que en la edición de 2005, cuando fue eliminado en semifinales por el actual campeón del mundo, el indio Viswanathan Anand. Nadie duda de que el Mozart del ajedrez ocupara ese trono; sólo falta saber cuándo.
«Pero eso no garantiza, en absoluto, su triunfo en el Magistral Ciudad de León, donde se enfrentará en semifinales a Morozévich o a Wang Yué (las normas del torneo indican que los dos primeros cabezas de serie no pueden encontrarse hasta la final). El ruso es tan genial como irregular, y por tanto puede tumbar a cualquiera; de hecho, su fama de rebelde no sólo se refiere a lo que ocurre fuera del escenario sino a que no acepta la superioridad de nadie en el tablero. Y para entender la enorme dureza del chino basta un detalle: en 2007 sólo perdió el 2% de sus partidas», manifiesta Marcelino Sión.
El genio despistado
En la otra semifinal estará el ucraniano Vasili Ivanchuk, de quien muchos expertos aseguran que ya habría sido campeón del mundo si su sistema nervioso fuera más estable. «Pero es precisamente ahora, en la frontera de los 40 años, cuando Ivanchuk muestra ese equilibrio que se ha traducido en una serie de resultados brillantes y en el tercer puesto de la lista mundial», asegura el director del torneo leonés.
Admirado por su genial creatividad, muy querido por su carácter cariñoso y tendencia al despiste, Ivanchuk es el campeón vigente del Magistral Ciudad de León, ya que en 2008 logró destronar a Anand (vencedor en siete ocasiones) en un duelo apasionante.
«Hay que recordar que después de una emocionante recta final, Vassily Ivanchuk ganó la competición y se alzó con el título del campeón del mundo de Ajedrez Relámpago 2007. Alcanzó 25,5 puntos en 38 rondas. El vigente campeón del mundo Vishy Anand, el segundo día de la final mostró mejor forma y parecía que se iba a coronar campeón de nuevo, adelantando al genial Vasili Ivanchuk. No obstante, en la última y decisiva ronda, justamente entre Anand e Ivanchuk, el indio sufrió una derrota y tuvo que contentarse con el segundo lugar (24,5 puntos). Tercero quedó el defensor del título, Grischuk gracias al mejor coeficiente de desempate que Kamsky».
La rebeldía corre a cargo del ruso Morozévich que llegó a manifestar «todo el sistema para jugar el campeonato del mundo falla por la base». En una entrevista en Sport Express, el cuarto clasificado en la lista mundial anuncia que no participará en el ciclo del Grand Prix de la FIDE, uniéndose a los tres primeros Anand, Kramnik y Topalov (según dice él) en este boicot. «Al rechazar jugar en el Grand Prix de la FIDE, no estoy abandonando la lucha», y explicó también que «no considera que haya una discriminación hacia los ajedrecistas rusos en los torneos de más alto nivel».
Cambio de sede
Tras ganar un gran prestigio internacional a lo largo de 21 ediciones (prácticamente todos las estrellas del ajedrez de los últimos dos decenios han jugado en el escenario del edificio de la Junta de Castilla y León), es un buen momento para cambiar de sede. La nueva es el majestuoso Auditorio de León, dotado con la más moderna tecnología, que también se aplicará a los comentarios de las partidas, en directo para el público e Internet, que realizarán el gran maestro Miguel Illescas y el maestro internacional Michael Rahal.
El torneo mantiene la simbiosis entre los organismos públicos (Ayuntamiento, Junta, Diputación y Universidad) y las empresas privadas (Alsa, Editorial MIC y Diario de Empresas), además de otros colaboradores. Una de las mejores pruebas de que el Magistral de León ha echado raíces profundas y es una de las citas más importantes del calendario mundial.
Fuente: ALFREDO J. GÓMEZ VALLADOLID
nortecastilla.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario